"Escenas de este mundo que están cambiando"
En esta época de vacaciones, marcadas por el ya concluido Mundial de Fútbol de Sudáfrica, y por los vaivenes del clima, en los que el Polo Norte está sufriendo olas de calor sin precedentes, mientras que el Polo Sur necesita de mucha calefacción y bebidas que aumenten la temperatura del cuerpo para aguantar el frío polar que azota al Cono Sur, los acontecimientos mundiales siguen sucediéndose a un ritmo que parece indetenible.
En estos días, se han filtrado a la prensa norteamericana miles (casi 96.000) de documentos que exponen a la opinión pública internacional detalles sobre cómo se desarrolla la guerra en Afganistán, y su repercusión en la Administración Obama apenas comienza, así que vale la pena estar atentos a lo que se desarrolla de las informaciones que se den a conocer sobre esta especie de "escándalo", que ya algunos comparan al de Watergate.
El desarrollo de los acontecimientos, y su conexión con el cumplimiento de la profecía bíblica, nos recuerda las palabras del apóstol Pablo sobre la "escena de este mundo que está cambiando". Ciertamente, cual obra de teatro globalizada, vemos en los portales informativos de Internet, Prensa escrita, noticieros, y demás medios de comunicación cómo los sucesos se están desenvolviendo. Quizás a quienes consideren estos asuntos como algo "conspiranoico" o "negativo", les sería muy bueno detenerse a analizar qué hay detrás de todas estas "movidas" o cambios de escenario a nivel mundial.
Por ejemplo, Estados Unidos sigue muy activo en su accionar sobre Irán y Corea del Norte. De hecho, se están desarrollando "ejercicios militares" en aguas de las dos Coreas como una especie de "disuasor" para que Corea del Norte desista de sus intenciones políticas, contrarias a los dictados de Washington.
Obviamente siguen las reuniones entre los líderes del mundo, con sus respectivas fotos en las que se estrechan la mano, brindando una imagen de "paz y seguridad", y de compromiso con la paz del mundo. No importa si se reúnen en ciudades como Londres, Buenos Aires, o Nueva Delhi. No importa qué banderas se muestren en esas imágenes, lo cierto es que se intenta exhibir que hay un verdadero compromiso de los líderes del mundo para dar resolución a esos conflictos que impactan la vida de los llamados "ciudadanos de a pie".
Lo importante es seguir alertas, con mente abierta, no dejándose impresionar por los ruidos que pretenden a veces manejar y crear matrices de opinión. Es obvio que el deseo de los grupos de poder que manejan los centros de toma de decisiones es el de mantener a la gente y a la opinión pública en general, a hacerlas creer y a direccionarse en las corrientes de información que estas élites de poder desean, dependiendo de la agenda de poder de turno.