Que venga Dios y ponga paz

Esta imagen corresponde a una marcha, llamada Protest the Pope. Los organizadores de la marcha esperaban 2000 personas. Pero ayer la movilización contra la primera visita de Estado de un pontífice desde la ruptura de Enrique VIII con Roma, hace casi 500 años, superó todas las expectativas y convocó a unas 12.000 personas (según la policía, 6000).

¿Qué tiene esto de extraordinario? Que fue la mayor protesta contra un papa en 20 años.

Con mitras de papel coloradas, pancartas con burlas y leyendas de todo tipo contra Benedicto XVI, la marcha fue pacífica y juntó a sobrevivientes de abusos sexuales, feministas, militantes ateos, agnósticos, defensores de la igualdad de las mujeres y los gay en la Iglesia, activistas pro aborto y miembros de organismos de derechos humanos.

"No creo que los contribuyentes debamos pagar por el viaje de una persona que encubrió los abusos sexuales de miles de niños", dijo al periódico LA NACIÓN de Argentina, Amar Karia, un manifestante de 19 años, hijo de hindúes, que se definió ateo. La visita del Papa tuvo un costo estimado en más de 30 millones de dólares, gasto que enfureció a la mayoría de los británicos, que no son católicos.

Amar llevaba un cartel que decía: "El Holocausto ocurrió; dejen de apoyar a quienes lo niegan", en referencia a la controvertida decisión del Papa de levantarle la excomunión al obispo lefebvriano negador del Holocausto, Richard Williamson, que vivió durante años en la Argentina.

La marcha opositora comenzó en Hyde Park Corner, el mismo lugar donde comenzaban a juntarse los fieles para asistir a la vigilia nocturna del Papa. Allí, miembros de Snap (Survivors of Those Abused By Priests) regalaban remeras negras con la imagen del Papa con las manos levantadas y encadenadas, con la leyenda de Arrest the Pope.

Hace unos meses, de hecho, dos famosos intelectuales ingleses ateos, Richard Dawkins y Christopher Hitchens, pidieron el arresto del Papa por su presunto encubrimiento de sacerdotes implicados en el escándalo de abusos sexuales contra chicos.

La marcha atravesó Picadilly y culminó en la zona de Downing Street, donde se levantan las oficinas del gobierno. Allí tomaron el micrófono líderes de los diversos grupos presentes, que atacaron al Papa en sendos discursos. Entre los asistentes a la protesta, también hubo famosos, como el actor británico sir Ian McKellen -que interpretó a Gandalf en El señor de los anillos -, que vestía una remera en favor de los derechos de los gay.

Si uno se pregunta el por qué de tantas protestas contra Benedicto XVI, sería absurdo pensar que son protestas contra la Iglesia Católica solamente, o contra el Papa de Roma. Vale la pena leer este artñiculo de opinión, firmado por Daniel Samper Pizano, publicado en el Tiempo de Colombia, y titulado "Venga Dios y ponga paz", que reproducimos a continuación:

"Dicen que hace años, el concejo de un municipio tolimense se planteó si era lícito pagar con dineros públicos el arreglo de las grietas de la iglesia parroquial. De allí se pasó a la teología, y a poco discutir estaba en duda la existencia de Dios. Llevado el problema a la más democrática de las soluciones, Dios se salvó por un voto, el de un concejal liberal que a última hora cedió ante las presiones de su mujer, beata y mandona.

La preocupación no es tolimense, sino universal. Como ocurre a menudo, Dios es otra vez tema de debate. El último libro del científico Stephen Hawking declara que la historia del universo no necesita de un principio divino. Muchos afirman lo mismo. Hawking, sin embargo, había creído hasta hace unos años en un ser creador, y ahora se suma al batallón de los ateos.

A mi modo de ver, el problema no es Dios, sino quienes pretenden representarlo y obrar en su nombre. Miren algunas de las noticias recientes en el mundo de la religión:

* Un anónimo pastor protestante de la Florida estuvo a punto de quemar ejemplares del Corán y desatar mortales represalias islámicas

* Varios grupos musulmanes amenazan con atacar una discoteca andaluza que se llama La Meca y tiene forma externa de mezquita.

* Una investigación realizada en Bélgica demuestra que 320 sacerdotes católicos abusaron de 450 niños entre 1950 y 1980.

* El rabino israelí Ovadia Yosef pide en un sermón la muerte del presidente de Palestina y todo su pueblo.

Desde hace milenios, la estupidez y sectarismo de los profetas de toda clase de credos han propiciado, en nombre de Dios, inquisiciones, guerras, injusticias sin nombre, abusos incalificables e intromisiones indebidas. La paciencia del Señor es eterna, pero la situación se ha puesto tan grave que debería hacer una aparición inolvidable en las Naciones Unidas, dar una palmada en la mesa y dictar el undécimo mandamiento, el que se le enmochiló a Moisés: "No fundarás religiones ni participarás en ellas".

O Dios prohíbe las religiones y los profetas, o ellas y ellos van a acabar con él. Y con nosotros."

Fin de la cita.

La reflexión del periodista es cierta. Han sido los llamados "representantes de Dios" (y cada religión quiere tener la exclusiva del marketing y promoción de mercadeo de Dios en la Tierra), los que han tomado la Biblia, u otros escritos, para justificar todo tipo de abusos en contra de las personas, hombres, mujeres y niños. 

Los principales responsables de que la gente haya vuelto su mirada al ateísmo, o al agnosticismo, o a la franca indeferencia hacia Dios, ha sido la propia religión. 

Las religiones son parte del problema, no la solución. Dios, el que describe la Biblia, es otra cosa. La Biblia describe que "Dios no es parcial". Lo dijo el apóstol Pedro, viendo que Dios mostraba su favor a personas gentiles, o no judías. ¿Nos imaginamos a Pablo o a Pedro mandando a quemar libros considerados sagrados de otras personas? En lo absoluto. Les veríamos, más bien, dirigiendo su mirada a inspirar en el corazón de las personas fe y esperanza. Obligar a la gente a creer en Dios, y amenazarla con descalificaciones, amenazas de fuego eterno, y cosas similares, no es algo que muestren los Evangelios.

Más información en:

http://www.eltiempo.com/opinion/columnistas/danielsamperpizano/venga-dios-y-ponga-paz_7924242-1

http://www.lanacion.com.ar/nota.asp?nota_id=1306142