El poder de la motivación
¿Quién no desea tener estabilidad económica, un buen matrimonio, éxito al criar a los hijos, sentir paz y satisfacción personal?
Pero, para lograr lo que se quiere, hay que tener motivación.
Motivación, es la voluntad para esforzarse, por alcanzar las metas que uno se propone, esforzarse para satisfacer alguna necesidad personal.
La palabra motivación deriva del latín motus, que significa «movido», o demotio, que significa «movimiento». La motivación puede definirse como el señalamiento o énfasis que se descubre en una persona hacia un determinado medio de satisfacer una necesidad, creando o aumentando con ello el impulso necesario para que ponga en obra ese medio o esa acción, o bien para que deje de hacerlo.
La motivación es la causa de la acción o de la no-acción.
Para impulsarse adelante, para motivarse a la acción, hay que romper los límites mentales y emocionales.
Porque cual es su pensamiento en su corazón, tal es él.
Proverbios 23:7
Uno es lo que piensa. Henry Ford inventó el modelo T, una planta de producción en línea para carros, porque creyó que todos los hombres eran dignos de tener uno. En los inicios de esta empresa, se supervisaban los matrimonios, y se iba a las casas para controlar que nadie tomara, trataban de mantener la moral de los empleados.
Hay una expresión que dice: “Piensa que puedes y piensa que no puedes; en ambos casos tienes razón”. Tú decides qué pensar; tú piensas lo que quieres. Tienes voluntad sobre tus propios pensamientos. Hay que vencer el pensamiento, esa creencia que te dice cuáles son tus limitaciones.
Para romper tus límites, esos "NO PUEDO", "NO SOY CAPAZ", "NO ES POSIBLE", debes pensar de otra forma, porque si pensando como has pensado hasta ahora se pudiera lograr lo que quieres haciéndolo de la forma que has tratado, ya lo hubieras podido hacer. Tenemos que romper los límites, pensar distinto, diferente. Si puedes pensar dormido, sigue pensando. Porque Dios no le va a dar ni un solo pensamiento al que no está pensando.
Por ejemplo, ¿cuántas personas siguen encadenadas a una relación que no funciona? ¿o a un trabajo que no les sirve, no les satisface? ¿es tu caso que te sientes dividid@?
¿Qué esperas para sincerarte contigo y actuar, hacer algo AHORA para resolver el problema? No se trata de actuar desesperadamente, o de forma alocada, sino de darle click a la mente, y cambiar, darle un giro a la acción.
Hay que cambiar el disco duro. Esos pensamientos negativos, pesimistas, llenos de fracaso, no sirven. No te sirven, no le sirven a nadie. Un pensamiento negativo no motiva a nadie.
Segunda cosa que hay que romper son los sentimientos. Es la cosa más traicionera. Pero todos andamos viendo cómo nos sentimos. Hay momentos en que no se trata de sentirnos mejor, sino de hacer las cosas. Si los sentimientos nos van a guiar, ¿cómo vamos a motivarnos a hacer lo que tenemos que hacer? Sentimientos de rechazo, de aceptación o no, de inferioridad, de falsa humildad, de inseguridad, de presión. Nadie puede motivarse así. Hay quienes no asumen el riesgo de iniciar una vida nueva, de romper con el pasado, o con una relación que ya no funciona. Otros temen no tener más presiones o responsabilidades. No permita que el sentir presión ante los cambios le impida actuar.
Hay gente que entra a concursar, dándose por vencido; que inicia el partido, creyendo que ya perdió. Porque para estas personas, es mejor abandonar una situación o un reto, que sentir la presión de tener que ganar. Si no sabes manejar la presión, no vas a poder romper tus límites.
Hay que ser realista. Por ejemplo, cómo sentirse impulsado a buscar empleo si ya has llenado tantas planillas, formularios o currículos y nunca te han llamado?
¿Seguir buscando trabajo cuando NUNCA le han llamado? ¿Qué le hace pensar que NUNCA le llamarán? Dicen que cuando una puerta se cierra se abre una ventana... tal vez no le llamaron, porque no le convenía, no era para usted ese trabajo. De repente, es iniciar un negocio propio lo que usted debería hacer. Imagínese: ¿no es mejor ser empresario que ser empleado? No importa que comience con poco. Bill Gates comenzó en un garage...
El poder de la motivación son impulsos que nos hacen actuar; son mecanismos que parten desde nuestro interior, que nos guían hacia el exterior. En otras palabras: es lo que nos hace actuar o no hacer nada.
Tipos de motivación
La conducta humana es compleja, y lo que motiva a una persona, desmotiva a otra. Pero se han reconocido los siguientes tipos de motivación. Si usted se conoce un poco, sabe qué le motiva o no, pero vale la pena reconocer estos tipos de motivación:
1.- motivación por logro
2.- motivación por competencia
3.- motivación por afiliación
4.- motivación por autorrealización
5.- motivación por poder
Tod@s tenemos, con mayor o menor intensidad, estas motivaciones.
Motivación por logro
"La motivación por logro es un impulso por vencer desafíos, avanzar y crecer". Por ejemplo, si a un individuo en su familia, escuela, iglesia, amigos y libros le hacían hincapié en el logro personal, su actitud hacia la vida tendía a ser familiar. Si recalcaban las amistades y la afiliación, las motivaciones estaban dominadas por las actitudes sociales.
También se ha comprobado que los países que cuentan con un mayor número de personas motivadas hacia el logro personal, tienden a manifestar un desarrollo económico y social más rápido. Este tipo de motivación conduce a metas e impulsos más elevados, ya que las personas trabajan mejor y alcanzan adelantos más sobresalientes.
La gente orientada hacia los logros personales busca el triunfo "per se". No experimenta una "sed de dinero" particularmente fuerte, aunque puede adquirir riquezas en su esfuerzo por alcanzar el triunfo. Trabaja gracias a su deseo de vencer obstáculos, alcanzar metas y ser útiles a otros.
Motivación por competencia
"La motivación por competencia es un impulso para realizar un trabajo de gran calidad". Los empleados que siguen esta motivación se esfuerzan por obtener un gran dominio de su trabajo y crecimiento profesional. Generalmente buscan realizar buenos trabajos debido a la satisfacción interna que obtienen de ello. Al realizar una tarea excelente, perciben una profunda satisfacción interior por su triunfo.
Las personas motivadas por la competencia esperan también que sus colaboradores desarrollen trabajos de gran calidad, y suelen impacientarse cuando estos realizan trabajos deficientes. De hecho, su impulso por el trabajo bien realizado puede ser tan grande que tienden a hacer caso omiso de la importancia de las relaciones humanas en el empleo. Por supuesto, las relaciones con otras personas en armonía no deben sacrificarse en aras de la eficiencia, siempre hay un punto de intersección entre la eficiencia y las buenas relaciones con otras personas.
"La motivación por afiliación es un impulso que mueve a relacionarse con las personas". Las comparaciones de los empleados motivados por el logro o el triunfo con los que se inspiran en la afiliación, mostrarán la manera en que estos dos patrones influyen en la conducta. Los que se interesan por el triunfo, trabajan con mayor ahínco cuando reciben una retroalimentación específica sobre sus éxitos y fracasos. Sin embargo, las personas que tienen motivaciones de afiliación laboran mejor cuando reciben alguna felicitación por sus actitudes favorables y su colaboración.
Las personas motivadas por el logro eligen asistentes competentes, sean cuales fueren los sentimientos personales que tengan hacia ellos. Sin embargo, los que se sienten motivados por la afiliación, seleccionan amigos para rodearse de ellos. Sienten una satisfacción interna mayor al encontrarse entre conocidos.
Motivación por autorrealización
"La motivación por autorrealización es un impulso por la necesidad de realización personal, es la tendencia del hombre a ser lo que puede ser, a utilizar y aprovechar plenamente su capacidad y su potencial". Esta necesidad se manifiesta a través del descubrimiento del Yo real y se satisface por medio de su expresión y desarrollo.
Evidentemente, cada persona siente la necesidad de manifestar de una forma específica su propio yo, y, por tanto, la tendencia a la autorrealización motiva comportamientos muy diversos, todos ellos dirigidos a un aprovechamiento de las propias capacidades.
"La motivación por poder es un impulso por influir en las personas y las situaciones". Las personas motivadas por el poder tienden a mostrarse más dispuestas que otros a aceptar riesgos. En ocasiones emplean el poder en forma destructiva, pero también lo hacen constructivamente para colaborar con el desarrollo de organizaciones de éxito.
Un estudio de la motivación del poder reveló que las personas motivadas por este factor llegan a ser excelentes líderes si sus ambiciones se encauzan hacia el poder organizacional más que hacia el poder personal. El poder organizacional es la necesidad de influir en la conducta de los demás para el bienestar de la organización como un todo. En otras palabras, estas personas buscan el poder a través de canales de liderazgo regulares, de manera que son aceptadas por otros y se elevan a posiciones de liderazgo debido a sus actividades sobresalientes. Sin embargo, si las ambiciones de un individuo se encaminan al poderío personal y a la manipulación política, dicha persona corre el riesgo de convertirse en un mediocre líder organizacional.
Estos son algunos potentes motivadores. No hemos señalado el poder motivador, ese impulso extra que genera el amor, la fe o la esperanza. El hacer realidad los sueños, o el superar obstáculos. Lo que sí está claro, es que todos los días necesitamos motivarnos, impulsarnos hacia adelante. ¿Cómo lograrlo? Eso depende de que desarrollemos la capacidad o el poder de la motivación.