Los Símbolos Bíblicos
El
símbolo
bíblico
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El arcoiris es un ejemplo de un símbolo bíblico. Fue la señal que dio Jehová a la Humanidad de nunca más destruirla por medio de un Diluvio.
Un arcoiris es la interacción de diversas formas de energía, y nuestros ojos lo perciben como una imagen hermosa, elegante, que transmite Paz.
El símbolo bíblico es, como lo ejemplifica el arcoiris, un vehículo comunicante de una idea, una verdad, o un concepto que Dios desea dar a conocer.
Verdades espirituales, los oráculos proféticos, las cosas futuras no vistas y lo eterno, ha sido representado por medio de símbolos, pues ha sido el placer del Gran Autor de las Escrituras el enseñar, usando el poder de la imagen y de la imaginación, para mostrar los secretos sagrados de la Persona Divina, la Providencia y de la gracia.
El simbolismo bíblico es uno de los asuntos más difíciles y complejos con que tiene que tratar todo estudiante de las Escrituras, y buscador de la verdad divina y espiritual.
El profeta Daniel reconoció ante el Rey Nabucodonosor que existe "un Dios en los Cielos que es un Revelador de Secretos" (Daniel 2:28). Nabucodonosor había soñado con un símbolo: una imagen pavorosa, con cabeza de oro, pechos y brazos de plata, vientre y muslos de cobre, piernas de hierro y pies de hierro y barro.
Era labor de Daniel interpretar al símbolo. Darle un significado, por eso buscó la guía de Jehová en oración y le fue revelado el significado del símbolo, es decir, del sueño de Nabucodonosor.
¿Por qué Jehová usa el símbolo? ¿No es mejor decir directamente qué es o significa una cosa y listo?
El carácter místico y enigmático del símbolo, exige un conjunto de cualidades y actitudes espirituales, que no muchos están dispuestos a tener, a fin de conocer el significado de dicho símbolo. Por ejemplo, los apóstoles pidieron a Jesús que les interpretara el significado de la parábola del trigo y la mala hierba. Ellos no fueron los únicos que escucharon a Jesús hablar de la parábola, pero sí demostraron ser los únicos interesados en aprender el trasfondo y significado de la parábola.
"¿No son de Dios las interpretaciones?", diría el José, soñador e intérprete de sueños (Génesis 40:8). Su pregunta es una afirmación: es a Jehová a Quien pertenece la interpretación del símbolo bíblico. De esa manera, Él se asegura de transmitir el verdadero conocimiento a quienes Él desee darlo.
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Símbolos
bíblicos:
Ejemplos
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El árbol del conocimiento del Bien y el Mal es, en sí mismo, un símbolo. Los querubines y la espada flameante colocados al oriente del Edén, son otros símbolos (Génesis 3:24).
La zarza ardiendo en Horeb (Éxodo 3:2) y las 10 plagas de Egipto, las columnas de nube y de fuego que iban delante de los israelitas (Éxodo 13:21) eran cosas simbólicas.
Son todos símbolos, excepcionales, por haber sido milagros. Milagros, hechos poderosos que significan la actividad poderosa y trascendente de Dios en la historia humana.
Los símbolos bíblicos más numerosos son los de visiones, y sueños de los profetas.
Si recordamos el contenido de libros proféticos, como los de Ezequiel, Amós, Zacarías, y Apocalipsis, son visiones, símbolos que requieren de una interpretación para tener una comprensión de su significado.
También son símbolos bíblicos, con valor didáctico, el tabernáculo, el arca del pacto, el propiciatorio, los sacrificios y ofrendas, y los lavamientos ceremoniales exigidos por la Ley, el agua del bautismo y el pan y el vino en la Cena del Señor.
El símbolo bíblico, necesita ser interpretado. ¿Cómo? ¿Puede cualquier persona comprender plenamente la simbología bíblica? Las Escrituras indican que Dios revela la interpretación, y luego es la interpretación la que se da a conocer. Símbolo y significado son enseñados, ya siendo interpretados con la guía de Dios. Ejemplo de ello, lo tenemos en la carta a los Hebreos, en la que el apóstol Pablo expone el significado espiritual del Tabernáculo y sus objetos, como ejemplos o tipos de una realidad espiritual mayor: Jehová, en Su exquisita grandeza, y la adoración que se le rinde con espíritu y con verdad, por medio del Sacerdocio de Cristo Jesús, como Sacerdote del orden de Melquisedec.
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